En el marco del conflicto laboral que protagonizan los trabajadores municipales de San Miguel de Tucumán, el secretario de Gobierno capitalino, Martín Viola, salió al cruce tras las declaraciones del líder gremial Osvaldo "Cacho" Acosta. En diálogo con Buen Día, informativo de LG Play, el funcionario cuestionó duramente las motivaciones del paro y desmintió las acusaciones de desmantelamiento en las áreas de obra pública.

"Lo único que quiere Acosta es beneficiarse él y sus amigos", aseguró, quien además señaló que desde el municipio se han hecho esfuerzos para dialogar y solucionar los problemas de los trabajadores. "Nosotros hemos invitado a Acosta a varias reuniones para coordinar temas vinculados a los empleados municipales, pero él las ha cancelado a último momento", añadió.

Trabajadores municipales hacen paro y denuncian el desmantelamiento de Obras Públicas

Viola fue enfático al afirmar que la verdadera razón detrás de la protesta es de carácter personal. "Acosta quiere obtener beneficios personales y ubicar a amigos suyos dentro de la administración municipal, sin importar si tienen el perfil adecuado", denunció el funcionario.

En cuanto a las acusaciones sobre la falta de equipamiento y el supuesto vaciamiento de la Dirección de Obras Públicas, Viola fue categórico: "No solo es falso, sino que invito a todos a ver la inversión que hemos realizado desde el minuto uno de nuestra gestión. Se han pavimentado más de 100 calles y se ha renovado la maquinaria, algo que no se veía en décadas".

Martín Viola.

El funcionario también cuestionó la falta de transparencia en las intenciones del dirigente gremial y lo acusó de utilizar el bienestar de los empleados municipales como una "pantalla" para sus propios intereses. "Cacho Acosta no está defendiendo a los empleados, está buscando favores para un grupo de amigos que lleva años beneficiándose de su complicidad", sostuvo.

En relación con el impacto del paro en la ciudad, Viola minimizó las consecuencias de la medida de fuerza: "En términos generales, el impacto es mínimo, pero si realmente queremos mejorar la ciudad, necesitamos que todos trabajemos juntos. El empleado municipal no puede ser utilizado para defender intereses personales", concluyó.